Fotógrafo de boda en Santiago de Compostela

Hola, soy Mero, fotógrafo de boda en Santiago de Compostela. Me encanta viajar, así que no tendré ningún problema en desplazarme allí donde te encuentres para contar vuestra historia.

Me apasionan las bodas, ver todo el amor de ese gran día y poder contar historias bonitas de una forma natural. No solo quiero captar instantes, sino las sensaciones y emociones que se generan alrededor de ellos. Quiero ser uno más en vuestra boda, para documentar cada uno de esos momentos únicos e irrepetibles que van a ocurrir.

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Fotógrafo de bodas en Santiago de Compostela

Sin palabras

¡Simplemente, genial!

Simplemente, único

Con decir que mi madre se enamoró del fotógrafo, ya lo digo todo. Mi madre odia las fotos y consiguió sacar lo mejor de todos. La mejor recomendación que pudieron darnos unos amigos. Además de sacar fotos se encarga, altruistamente, de animar a los invitados a entrar en la iglesia, a los de la música a que empiece a sonar la música,... es el mejor. Seguiremos en contacto seguro.

Nos decantamos por Mero tras ver sus fotos y quedarnos encantados. Una vez lo conocimos tomándonos un café de esos que tanto le gusta, sabíamos que habíamos elegido bien. Desde el momento uno muestra todo su interés y te ofrece ayuda en todo lo que necesitas, sobre todo cuando le dijimos que la organizábamos a distancia y sin tener que preguntar él nos ofreció su ayuda.
Buscábamos un fotógrafo modo incógnito y lo hemos tenido! Ahora nos toca esperar ansiosos a ver las fotos, aunque después de ver el SDE el día de la boda, ¡sabemos que serán geniales! Su locura es contagiosa, y los invitados encantados de poder dejar de lado esas formalidades al posar. ¡Sin duda un gran profesional!

No hay palabras para describir a Mero: único, irrepetible, profesional pero, sobre todo, amigo. El primer día que lo vimos, dijimos que si alguna vez nos casábamos, este sería nuestro fotógrafo y así fue. ¡Nos acompañó en uno de los días más bellos de nuestra vida, y no solo como fotógrafo sino como dije antes, como amigo! La mejor elección que pudimos hacer. Gracias Mero por cruzarnos en nuestro camino. ¡Hasta pronto, esta vez como invitados!

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